lunes, 12 de octubre de 2009

BASTARDOS SIN GLORIA

Este fin de semana se estrenó la nueva película de Quentin Tarantino BASTARDOS SIN GLORIA.

Tarantino es de los pocos directores (si no es que el único) que ha sabido manejarse en el cine comercial sin perder su propuesta y su esencia.
Eso no las ha dejado claro en cada una de sus películas: Perros de reserva, Tiempos violentos, Jackie Brown, Kill Bill 1 y 2, A prueba de muerte.
Cada una de ellas se ha convertido instantáneamente (merecidamente) en cinta de culto.
Diálogos inteligentes, humor ácido, violencia, personajes inolvidables... se pueden encontrar en todas las ya mencionadas.
Bastardos sin gloria no es la excepción.

Como habrán visto en los avances o en los afiches de la película, la historia se desarrolla en la segunda guerra mundial y un grupo de soldados americanos y algunos europeos judíos perseguirán a los nazis para darles una sopa de su propio chocolate.
Este argumento basta para salir corriendo al cine más cercano. Los pesimistas comentarán: otra película de nazis...
Pero no es otra simple película de nazis. Tarantino tiene el don de saber contar una historia, y de hacerlo además, de forma inteligente y divertida. Efectivamente trata de los nazis y está ambientada en esa época, pero las historias (porque son varias que se entrelazan) están muy bien estructuradas y nos muestran otras perspectivas que no se habían tocado en las demás películas de nazis.

Otros le restarán valor al trabajo de Quentin argumentando que abusa de la violencia. Lo que no ven o no quieren ver, es que cada escena violenta está perfectamente justificada bajo los parámetros de la historia que nos está contando. Aún así, para el más quisquilloso de los críticos, Bastardos le llenará el ojo por lo siguiente:

La fotografía es sencillamente sublime; los paisajes parecen lienzos pintados por el mejor pintor. Hermosas locaciones y sets que te transportan a 1941. El cine -donde se desarrollará el clímax de la película- es impresionante.

Cuenta con el mejor musicalizador de películas: Ennio Morricone. La música juega un papel muy importante en las películas de Tarantino; sus soundtracks están plagados de excelentes canciones. En este caso recurrió a Ennio para darle todavía mayor carga emocional a la historia y sólo escuchamos una canción -muy a lo Tarantino- a cargo de Bowie en una escena clave.

Como mencioné, a lo mejor no parece tan original contar una historia de nazis, pero si hacemos un recuento de las películas de nazis que hemos visto nos daremos cuenta que todas se apegan lo mejor posible a la historia; son conservadoras y políticamente correctas. Quentin va más allá; en lugar de hacer coincidir su historia con la Historia que todos conocemos (que no se le reprocharía y encajaría perfectamente), le da un giro y nos presenta otro desenlace; la vuelve una historia fantástica.

Las actuaciones son impresionantes. Mencioné que cada película de Tarantino está plagada de personajes inolvidables e irrepetibles; aquí lo vuelve hacer.
Brad Pitt (Lt. Aldo Raine) le da vida de manera más que acertada a un soldado americano sureño sediento de sangre y cueros cabelludos; demostrándonos que cuando no le dan papeles de "galán" actúa muy bien. Excelente caracterización: su bigotito sorprende, pero lo hace más esa extraña cicatriz en el cuello.
Melanie Laurent (Shossana Dreyfus) es un rostro fresco -y hermoso- en el cuál recae mucha de la carga emocional de la historia.
Diane Kruger (Bridget Von Hammersmark)que recordarán como Helena en Troya, le da vida a una hermosa actríz alemana; bella, talentosa, sexy y con un secreto...
Eli Roth (Sgt. Donny Donowitz) que también es director de cine (Cabin fever, Hostal 1 y 2) nos demuestra que es mucho mejor actor que director. Ya nos había dado atisbos en A prueba de muerte, pero con su personaje de El oso judío (con su infame bat) nos demostró de lo que es capaz.
Daniel Brühl (Pvt. Fredrick Zoller) que saltó a la fama con Adiós a Lenin, le da vida a un alemán fresón, hijo de papi que por azares del destino se convierte en héroe de guerra y del que hacen una película que servirá de propaganda nazi. Carismático, simpático e inocente hasta que algo hace que salga su verdadero yo. Su escena con Melanie Laurent en el cine es poética.
Til Schweiger (Sgt. Hugo Stiglitz) es un sanguinario malhumorado. Si les suena el nombre de su personaje, no es fortuito, es un tributo de Quentin al actor mexicano de culto del mismo nombre. También en la película se hace referencia a México cuando en un enfrentamiento mencionan que deberían hacer un mexican stand.
Mike Myers (General Ed Fenech) será un poco difícil reconcerlo tras la excelente caracterización de su breve aparición. Totalmente disfrutable.
Denis Menochet (Pierre LaPadite) nos brinda una conmovedora -aunque breve- actuación en la impresionante secuencia inicial de la película. Se da un mano a mano con:
Christoph Waltz (Col. Hans Landa) que se lleva la película, y eso es mucho que decir, porque el nivel de actuación está muy por encima del promedio. Encantador, educado, culto, carismático, inteligente, sagaz, políglota. Es la contraparte de Aldo Raine. A pesar de su atrocidad, no evitarás sonreir con él. Nos hace pensar en qué es peor: un cabrón frío, educado (muy europeo) como él o uno explosivo medio güey (muy gringo) como Raine.

Estos son sólo algunos de los personajes; como mencioné, está plagada de personajes secundarios e incidentales muy bien desarrollados y necesarios para la historia.
A pesar de que es una clara crítica al régimen nazi, Tarantino también aprovecha la oportunidad para criticar -muy a su estilo- la faltara de cultura general de los gringos: se hace referencia que sólo saben inglés. De hecho, la película está hablada en cuatro idiomas: alemán, francés, italiano e inglés. Gran acierto ya que le brinda credibilidad a la trama.

Las imágenes se te quedarán grabadas en la mente como los métodos (poco comunes) de los bastardos y la escena final del cine que es inmortal.

Resumiendo:
*Bastardos sin gloria es una película que debe de verse no importando si se está o no familiarizado con el cine tarantinesco.
*No se espanten por las dos horas y media que dura; en ningún momento se cae, al contrario, el nivel de tensión y expectación van aumentando con el paso de los minutos.
*Seguramente ganará varios reconocimientos y nominaciones.
*Es la mejor película del año.
*Tarantino, además de ser un director de películas de culto, ahora se ha convertido en uno de cine de arte.

2 comentarios:

  1. Y en qué parte habrá salido Mike Myers?

    ResponderEliminar
  2. Es el capitán que organiza la "misión del cine"; aunque seguramente ya lo sabías y sólo me estabas molestando... grrrrr

    ResponderEliminar